Un buen soldado de Cristo
Tema: Un buen soldado de Cristo cita: 2 Timoteo 2:3
El propósito del apóstol Pablo, con la carta dirigida a Timoteo, es recordarle que como un buen soldado de Jesucristo él iba a sufrir penalidades, oprobios y todo tipo de ataques por parte del enemigo.
Sufrir: cuando vemos el significado de dicha palabra, entendemos qué, lo que se le está diciendo a Timoteo, es que tenía que recibir con resignación, cualquier daño moral o físico, y de esta manera se le está diciendo que tenía que sufrir, aguantar, padecer, soportar, resistir, tolerar, o sobrellevar las penalidades, aflicciones, disgustos, inconveniencias, penurias, padecimientos etc, de la misma forma que un buen soldado terrenal.
2 Timoteo 2:3 [RV60]
Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo.
Un soldado: Es una persona que sirve en el ejército, por lo tanto, es un militar, un recluta Y es un guerrero. En este tema, hay toda una gama de riquezas, de las cuales hay mucho que aprender, acá encontramos una serie de aspectos relevantes, en las que vale la pena analizar.
Uno de los aspectos importantes, es que si la Biblia menciona a un buen soldado, es porque también existen malos soldados, eso lo conocemos, ya sea porque eres participante del ejército en tu país, o simplemente porque lo has visto en alguna película en la televisión. Una de las características de un mal soldado, es que sea un desertor, en las milicias de Cristo como soldados nunca debemos ser desertores porque sabemos que eso significaría la muerte, te lo diré de una forma clara, esto es, o luchas, o mueres, así de simple.
Otra de las características de un mal soldado, es que siempre está pensando en negativo, que le va a ir mal, que se va a morir, que no va a dar la talla, que lo van a matar en esa guerra, etcétera. Mientras que un buen soldado, siempre está pensando en positivo, le llegan esos pensamientos y en su mente dice; Yo voy a salir bien, voy a vivir, voy a regresar con mi familia etcétera.
Cabe señalar que los militares antes de ir a un enfrentamiento, a un campo de batalla, primero pasan por un fuerte entrenamiento, para estar preparados a la hora de la guerra, estos soldados pasan horas y horas en entrenamiento físico, y en el aprendizaje de cómo manejar, y maniobrar las armas que llevan para atacar en el combate. es por esto que el apóstol Pablo usa en este pasaje una metáfora, haciendo un símil de un soldado literalmente hablando. Nosotros al igual que un soldado de un ejército de cualquier país del mundo, para poder usar nuestras armas espirituales, principalmente la palabra de Dios, que es la espada de la fe, tenemos que pasar horas y horas en el estudio de la Santa y bendita palabra de Dios, también tenemos que pasar en consagración con él, para poder darle un buen uso a esa arma poderosa en Dios. Dice la Biblia que usemos bien la palabra de verdad.
2 Timoteo 2:15 [RV60]
5 Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad
Cuántos cristianos hoy día están dando un mal uso a esa arma, unos intencionalmente, y otros por falta de preparación en el terreno, pues no están siendo entrenados. Dicho de otra manera, no le están dando el discernimiento a la palabra a como debe de ser, y en su mayor parte, esto se debe a la falta de conocimiento, y en algunos casos directamente por desconocer costumbres o raíces hebraicas etcétera, digo esto porque la Biblia se dió a través de los judíos, y para los judíos, dicho de otra forma fueron ellos los que la escribieron, Por ende está basada en su gran mayoría con lenguajes que van desde sus costumbres hasta sus raíces hebreas. Sólo para mencionar un ejemplo vamos a ver el siguiente texto bíblico.
Lucas 18:25 [RV60]
25 Porque es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios.
Los cristianos en su gran mayoría, al darle la interpretación a este texto, en lo primero que piensan es que un camello va a pasar por el ojo de una aguja de coser o zurcir ropa, que es la aguja que nosotros conocemos, lo cuál sería totalmente imposible, pero al conocer las costumbres judías nos damos cuenta, que Jesús no se estaba refiriendo a una aguja de la que nosotros conocemos, sinó que él se está refiriendo a una costumbre antigua de los judíos, y era que en esos tiempos la Ciudad de Jerusalén estaba amurallada, y ahí había un portón principal, el cual se cerraba a una hora determinada o específica, y después de esa hora ya nadie podía entrar ni salir de la ciudad por dicho portón, pero había un hombre encargado de la vigilancia, el cual su función era ver cuando llegaban algunos ciudadanos ya pasados de la hora en la cual se había cerrado el portón principal, y los dejaba pasar por un Portillo que estaba a la par de dicho portón, a ese Portillo se le conocía por el nombre de aguja, y cuando llegaba un ciudadano montado en su camello y él quería entrar, forzaba al camello a entrar por el hoyo de la aguja, lo que para nuestras costumbres y lenguaje es pasar por un Portillo, entonces el camello con mucha dificultad lograba pasar pero al final lo conseguía, es a eso a lo que se está refiriendo Jesús. Luego al tomarlo nosotros a nuestra forma de mirar o entender, le estamos cambiando totalmente el sentido de la interpretación a este pasaje, y al hacerlo, estamos dando un mal uso a esta palabra de verdad.
Ahora vamos a analizar, cuales son las penalidades o sufrimientos, por los cuales pasa un soldado cuando está en la montaña, en una guerra a muerte con el enemigo, estás penalidades o sufrimientos son:
1) hambre, 2) sed, 3) cansancio, 4)dolor, 5) debilidad, 6)llanto. Etc.
Cuando tú eres un buen soldado de Cristo, puedes sentír hambre, sed, cansancio, dolor, debilidad y hasta puedes llorar, pero nunca te rendirás, porque el centro en tu vida es, y será Cristo Jesús.
Como buenos guerreros de Cristo cuando sentimos hambre y sed, recordamos las palabras que él nos dejo en las sagradas escrituras, esto es para los que salgamos vencedores, en esta lucha que tenemos a diario, a cuartel abierto.
Apocalipsis 7:16 [RV60]
16 Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno.
Cuando sentimos cansancio miramos a Cristo Jesús en su palabra diciéndonos:
Éxodo 33:14 [RV60]
14 Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso.
Cuando sentimos dolor en nuestro hombre interior volvemos la mirada a Cristo Jesús y a su palabra.
Salmos 103:3 [RV60]
3 El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias.
Cuando sentimos debilidad la respuesta está en Jesucristo.
Corintios 12:10 [RV60]
10 Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Cuando lloramos amargamente, en medio de fuegos cruzados, la respuesta siempre será nuestro señor Jesucristo.
Mateo 5:4 [RV60]
4 Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
Con todo y esto, nosotros vemos en la palabra de Dios, que a nosotros se nos dió él sufrir como un privilegio.
Filipenses 1:29 [NTV]
29 Pues a ustedes se les dio no sólo el privilegio de confiar en Cristo sino también el privilegio de sufrir por él.
Amado hermano y amada hermana en Cristo, cuántas veces te ha tocado sufrir penalidades como un buen soldado de Jesús, cuántas veces te han humillado, cuántas veces te han insultado, cuántas veces has tenido que perder un empleo debido a tu fe. Esto se da porque entre más fiel eres a Diós, más obstáculos, dificultades, o rechazos te encontrarás en el camino, esto se debe a que el enemigo, entre más leal eres con Dios, el tratará de vencerte y matarte en esta batalla. Porque él sabe que se está forma pueden llegar a tu mente malos pensamientos, él puede usar incluso, artillería pesada, para atacar la base militar que está en tu mente, pero es en ese preciso momento, cuando tú tienes que atrincherarte, y como un buen soldado de Cristo, recordar lo que dice su palabra.
2 Corintios 10:4 [RV60]
porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,
Dios te bendiga y te guarde, son los deseos de tu hermano y amigo, Paúl Torres.