viernes, 2 de abril de 2021

Las 7 palabras de Jesús en la cruz del calvario.




 Tema: Las 7 palabras de Jesús en la cruz del calvario.


El plan perfecto de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, fue venir a morir por nuestros pecados.


En esta semana casi en el mundo entero se conmemora o se recuerda la pasión y muerte de Cristo, como suele llamarse  a este magno evento, y precisamente hoy viernes es donde se recuerda el día en que nuestro señor Jesús expiró en aquella cruz en el Gólgota, después de haber sufrido tanto dolor,  tanto oprobio Por parte de aquellos  que lo crucificaron. 


Aunque hasta la fecha todavía no se ponen de acuerdo los eruditos y los estudiosos de la Biblia  con respecto a la fecha de la muerte y resurrección de Cristo, lo que sí podemos desir es que estando en su lecho de muerte, Él proclamó siete palabras, las cuales han sido  transcendentales através de la historia, siete palabras que tuvieron un gran significado para la raza humana. hoy estaremos analizando cada una de ellas.


1) Padre perdonalos por qué no saben lo que hacen.


RVR60 S. Lucas 23:34

"34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes.".  


Cuando el Rey del universo mencionó estas palabras, está haciendo énfasis en qué los judíos no sabían lo que estaban haciendo ya que el mismo Dios había endurecido sus corazones con un propósito, el cual fue que nosotros los gentiles alcanzaramos  misericordia através del endurecimiento de ellos.


RVR60 Romanos 11:25-26

"25 Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles;

26 y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de Jacob la impiedad.". 


2) De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.


RVR60 S. Lucas 23:43

"43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso."  


Todos sabemos que el Cristo de la gloria fue crucificado junto a dos malhechores, uno de ellos se dedicó a vituperar al Mesías, en cambio el otro le reprochó su actitud, y después de hacerlo le dijo a Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino, fue en ese preciso momento donde nuestro Señor Jesucristo le dijo, de cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso, haciendo referencia a que perdonó sus pecados, en el último momento de su vida, aquél varón se dolió por sus pecados, y Cristo lo perdonó. De esa misma forma cuando nosotros nos arrepentimos de nuestros pecados Cristo nos perdona, y nos da la esperanza de que un día estaremos con Él.


3) mujer, he ahí tu hijo, hijo he ahí tu madre.


RVR60 Juan 19:26-27

"26 Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo.

27 Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa." 


En este aspecto Jesús sabía que Él estaba pasando por un momento crucial en su vida, estaba a punto de partir de este mundo humanamente hablando. Jesús de Nazaret fue el primer hijo de María, y según la costumbre judía el hijo primogénito no podía alejarse de sus padres hasta no darles sepultura, miramos un ejemplo de esto que hablo donde en (Mateo 8:21-22) Jesús le dice a uno de sus discípulos que lo siguiera y este le dice, deja que valla y entierre a mis padres, en ese momento no era que sus padres estuvieran muertos, sino que él estaba haciendo referencia a la costumbre. Después de esta pequeña aclaración continuamos diciendo que Jesús sabiendo que ya estaba apunto de morir transfirió su responsabilidad a Juan su hermano en la carne, y desde aquella hora Juan la recibió en su casa. 


En este aspecto Jesús nos está dando una reflexión, y es que tenemos que ser responsables con nuestros padres, los que un día nos dieron la vida, los que un día miraron por nosotros cuando no podíamos valernos por nosotros mismos. Es desgarrador ver tantas tantos ancianitos  por el mundo entero pasando tantas necesidades, y con hijos que tienen muchas posibilidades económicas, y no son dignos de apoyar a sus padres, siendo estos mismos ancianos los que un día dieron todo por sus hijos, incluso los prepararon intelectualmente, hasta el punto de que llegaran a ser profesionales para que hoy fueran lo que son.


4) Elí, Elí, lama sabactani?



RVR60 S. Mateo 27:46

"46 Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí,¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío,¿por qué me has desamparado?" 


Indiscutiblemente Jesús fue 100% Dios y 100% hombre, y estando en su naturaleza humana como hombre él exclamó, Dios mío Dios mío por qué me has desamparado?, en el preciso momento cuando llevó nuestras cargas, nuestros pecados, los cuales cayeron sobre sus hombros y él sintió el peso del pecado,  fue en ese preciso momento donde la deidad, la divinidad se apartó de la humano,  porque lo Santo, lo divino, no podía hacer contacto con el pecado, en ese instante Jesucristo se sintió sólo humanamente hablando, En otras palabras sintió una angustia profunda, un dolor agonizante con esa carga tan grande la cual fue tu pecado y el mío.


RV'2004 Isaías 53:6

"6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en Él el pecado de todos nosotros.". 



5) Tengo sed.


RV'2004 Juan 19:28

"28 Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, para que la Escritura se cumpliese, dijo: Tengo sed." 


Ya faltando pocos minutos para que nuestro Señor muriera, el dijo tengo sed, algunos mal interpretan estas palabras, y dicen que Jesús se refería a la sed por  las almas,  personalmente creo no equivocarme  que en ese momento no se está refiriendo a la sed de las almas, es verdad de que Jesús sentía amor por las almas, pero en ese preciso momento el siendo 100% hombre sintió o sed literalmente hablando. Es obvio que el Maestro sintiera sed natural, ya que había pasado varias horas sufriendo latigazos, cargando la cruz, sintiendo  el calor del sol, en la época más caliente  en Israel, y peor aún, con mucha pérdida de sangre colgado en la cruz del madero con clavos en sus manos y en sus pies. Fue tanta la sed que sintió que su lengua se pegó a su paladar. Esto pasó para que se cumplieran las profecías que veremos a continuación.


RV'2004 Salmos 22:15

"15 Se secó como un tiesto mi vigor, Y mi lengua se pegó a mi paladar; Y me has puesto en el polvo de la muerte."  



RV'2004 Salmos 69:21

"21 Me pusieron además hiel por comida, Y en mi sed me dieron a beber vinagre." 



6) Consumado es.



RV'2004 Juan 19:30

"30 Y cuando Jesús tomó el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu."  


Cuando Jesús pronuncia estas palabras y dice consumado es, lo que está diciendo que todo había concluido en su totalidad, entendemos esto sabiendo que en Cristo se cumplió la ley y los profetas, todo lo que hablaron aquellos Santos varones en el antiguo testamento, se cumplió a cabalidad en la crucifixión, muerte y resurrección de Cristo El Salvador del mundo. La obra redentora del Mesías había finalizado con el sello perfecto, mismo que estuvo en la mente de nuestro Dios, desde antes de la fundación del mundo.


TLA 1 Pedro 1:19-20

"19 al contrario, pagó con la sangre preciosa de Cristo. Cuando Cristo murió en la cruz, fue ofrecido como sacrificio, como un cordero sin ningún defecto.

20 Esto es algo que Dios había decidido hacer desde antes de crear el mundo, y Cristo apareció en estos últimos tiempos para bien de ustedes." 


7) Padre en tus manos encomiendo mi espíritu.



VM'1929 Lucas 23:46

"46 Y Jesús, clamando a gran voz, dijo:¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu! y habiendo dicho esto, expiró.".  


Después de ese duro proceso Qué pasó nuestro señor Jesucristo, la última palabra que dijo antes de expirar fue, Padre en tus manos encomiendo mi espíritu, y ahí queda terminada su obra, y gracias a su muerte y al derramamiento de su bendita sangre es que  tú y yo hoy tenemos perdón por nuestros pecados, la sangre de Cristo nos limpia de todo pecado, amén.

Autor: Paúl Torres